PEDRO MARÍA URUÑUELA NÁJERA 12/10/2009
Comienza el nuevo curso escolar y reaparecen opiniones sobre la situación que se vive en las aulas, describiéndola en términos preocupantes, como marcada por la violencia psíquica y física que ejercen los alumnos hacia sus profesores, concluyendo que la situación es insostenible. A continuación, se proponen soluciones, la principal de las cuales es reintegrar de nuevo al profesorado la autoridad perdida, reforzando su poder sobre los alumnos. El lector se plantea dos cuestiones: ¿Qué situación se está viviendo en los centros educativos? ¿La solución necesaria es la recuperación de la autoridad perdida y su refuerzo entre el profesorado?
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ResponderEliminarHola. Pues aceptando la invitación, allá voy.
ResponderEliminarCreo sinceramente que hay un problema de base con todo el tema de la autoridad. Y es que la autoridad no es mala, todo lo contrario, es necesaria para la correcta formación del niño. Para hacerle ver ya desde pequeño que no todo en esta vida tiene que ser su santa voluntad.
Porque aunque los padres y los profesores le consientan, para que no sufra, para que se realice, etc, ya se encaragará la vida (sin pedirle permiso) de darle golpes contra los que no puede hacer nada. Todos tenemos experiencia, y ¿entonces qué? La persona se desmoraliza o se evade, porque no está preparada para asumir que él o ella no son el centro del universo.
Y en esos momentos se dará cuenta de que no está preparado para afrontarlos, ya que no tiene capacidad de sufrimiento, de autocontrol, de humildad.
La autoridad, mezclada con el amor, es básico para nuestro correcto desarrollo.
No sé si me he explicado muy bien, pero yo sé lo que quiero decir.
Gracias y ánimo!
La verdad es que convence.
ResponderEliminarEstoy deacuerdo contigo, la autoridad llevada a cabo como toca (amor, por ejemplo), desde mi punto de vista también es favorable para la educación de un niño/a, para llegar a una educación íntegra.
Un saludo.
Me alegra que coincidamos, porque hoy en día cuando se oye hablar de autoridad la gente se pone toda tensa. Como decía, se le ha dado un matiz negativo, así como si la autoridad vieniera a hacer un mal. Da como miedo.
ResponderEliminarPero no, la autoridad bien entendida, es la clave. Porque dota a los niños de una cosa fundamental, la capacidad de asumir situaciones desagradables. Cosa para la que los jovenes de hoy en día, en su inmensa mayoría, no sabe hacer. Así nos va.
Autoridad y cariño. Esa mezcla es fundamental.